El ocultismo es la religión original, de la que surgen
todas las religiones. Pero en el ocultismo, existen, el sendero de la mano
derecha, y el sendero de la mano izquierda. En la India, la derecha son los senderos
religiosos de las distintas corrientes, y la izquierda, es el Tantra, que
utiliza, eventualmente, lo pecaminoso, como el sexo, y el comer carne, como
vehículo de elevación espiritual.
La teosofía y la metafísica del Yo Soy, tomaron la
derecha, como magia blanca, e izquierda como magia negra, diciendo que, la
magia blanca hace el bien y acerca a Dios, mientras que la magia negra hace el
mal y aleja de Dios. Actualmente, con el auge de la magia negra y de la
izquierda, en comienzos del siglo 21 (escribo éste artículo, a fines del año
2019), se redefine la derecha, como el sendero de fusión con el universo,
considerando la ley del karma y la ética, y se define a la izquierda, como el
sendero de la auto-transformación en ser divino, conservando la individualidad.
Éstas definiciones de la derecha y de la izquierda,
antiguas y modernas, no resultan del todo satisfactorias, y van cambiando con
el tiempo y con el paso de una cultura a la otra. Y por lo tanto, me parece
bueno reflexionar sobre ellas, y también me parece bueno, pensar sobre si
realmente existen ambos senderos.
La verdad, sin embargo, es una sola, que todas las cosas
provienen de Dios por emanación, y que todas las cosas se fusionarán con Dios
en absorción. Y por lo tanto, el objetivo es uno solo, la fusión con Dios,
pasando por una etapa previa de auto-transformación en un ser divino, por medio
de la ascensión espiritual.
La derecha, es correcto, se concentra en hacer el bien,
considerando la ética y la ley del karma, y la izquierda, considera medios para
atenuar el mal karma, y usar, eventualmente, lo malo, como medio de unión con
Dios. La derecha puede incluir magia blanca, para hacer el bien, y la izquierda
puede incluir magia negra para hacer el mal, pero ni la derecha ni la izquierda
se concentran en la magia, precisamente, sino que se concentran en el
desarrollo espiritual.
Las definiciones modernas, de la derecha y de la
izquierda, y el sólo hecho de plantear una derecha y una izquierda, a nivel
espiritual, no tienen sentido, pues la unión con Dios, previa ascensión, es el
único camino verdadero, lo cual se logra en la senda del bien, pero sí es
verdad, que existen medios, de atenuar el mal karma, y de usar, eventualmente,
lo pecaminoso, como medio de unión con Dios, y un buen buscador espiritual,
eventualmente, en su avance por el sendero, tomará provecho de todos los medios
a su alcance, para evolucionar espiritualmente, aunque el mundo lo menosprecie
llamándole seguidor del sendero de la mano izquierda, o seguidor de la magia
negra. Eso no es magia negra ni sendero de izquierda, sino que es verdadero
avance espiritual.
Usar la Llama Violeta para consumir el mal karma, sin
dolor ni sufrimiento, es de izquierda, meditar en Jelkerá-Dios, que incluye y
supera a todo, también es de izquierda, rezar a Jelkerá-Dios, en su unidad y en
su diversidad, es hacer magia, así que también es de izquierda, pensar por uno
mismo, sin libros ni maestros, también es de izquierda, y para muchas personas,
un buen jelkeriano, es de izquierda.
Por otro lado, para algunos magos negros, los jelkerianos
somos de lo más de derecha que existe, pues buscamos la unión con Dios,
consideramos la ética la moral y la ley del karma, creemos en un paraíso, como
algo mejor que el infierno, en la rueda de reencarnaciones, y consideramos a la
magia y a la adivinación, como practicas inferiores a la oración, a la
meditación, y a la devoción pura y desinteresada. Por lo tanto, para algunos
magos negros, lo nuestro es religión y no magia, así como para los que se creen
religiosos, nosotros somos magos negros.
Tampoco tiene sentido, en realidad, la división entre
alta magia y baja magia, llamando alta magia, a la que tiene una gran carga de
ceremonias, filosofía, cultura general, y objetos caros y difíciles de
conseguir, y llamando baja magia, a la que tiene una carga de pura intuición,
poca filosofía aparentemente, nada o poca cultura general, y objetos fáciles de
conseguir, tanto así que se pueden sacar de la cocina de una casa cualquiera.
La alta magia y la baja magia, son magia, y ambas son poco útiles, si no están
cargadas de devoción. Además, la mejor magia, es la que más funciona, y no la
que aparenta ser mejor o peor.
La verdad es una sola; la separación entre derecha e
izquierda, proviene de la ignorancia, y no de la más pura Conciencia de Cristo,
pues el único objetivo correcto, es la unión con Dios, previa ascensión del
alma a un estado divino y angélico, donde ya no hay karma, y la evolución es
por cumplir la voluntad divina, y no por ser buenos, pues lo bueno para el
alma, puede ser la destrucción y no la creación. En nuestro camino espiritual,
debemos considerar todos los medios para nuestro desarrollo espiritual, aunque
no sean bien vistos por la sociedad, que siempre ha estado en manos del Diablo,
y cayendo en su tentación, y por lo tanto, lo que queda bien en la sociedad, no
es una fuente confiable de conocimiento espiritual.
Con respecto a la magia blanca y a la magia negra, creo
que tampoco existen, pues un mago blanco, puede hacer lo constructivo y lo
destructivo, según su criterio, igual que un mago negro, solo que el mago
blanco, sigue una moral algo menos discutible, mientras que al mago negro, no
le importa la moral, y hace lo que le pidan, con tal de que se le pague. Si los
senderos de la mano derecha e izquierda, no existen, entonces, la magia no
tiene colores, y no es ni blanca ni negra, cuando uno profundiza en la
sabiduría oculta, más allá de la ignorancia de los no iniciados en los
misterios ocultos.
Hay senderos que son más aceptados socialmente, y a esos
senderos se los llama derecha, así como a los senderos menos aceptados
socialmente, se los llama izquierda, pero la sociedad, en general, es muy
ignorante en espiritualidad verdadera, e incluso las personas más educadas
culturalmente, y con más dinero y poder en la sociedad, son las menos aptas
para clasificar las cosas a nivel espiritual. Hay de todo, bueno y malo, en
todos los niveles culturales y sociales, pero las clasificaciones, de magia
versus religión, de magia negra versus magia blanca, de alta magia versus baja
magia, son superficiales y no son un reflejo de la realidad espiritual, sino
que son un reflejo de la ignorancia espiritual, y de lo superficial del
pensamiento de la masa de la sociedad.
El Tantra es tan espiritual como el Dharma, la
continuidad del tejido entre la materia y el espíritu, es tan espiritual como
la ley. Despreciar la ley en beneficio del tejido que une materia y espíritu,
es tan erróneo como despreciar el tejido que une materia con espíritu, en
beneficio de la ley. Es falta de comprensión de la verdad espiritual. En
realidad, no hay ni derecha ni izquierda, ni tampoco hay pilar del centro. Lo
que hay es comprensión de la verdad espiritual, de que en el fondo, todo es uno
y todo es Dios.
Si yo tuviera que ubicar a la doctrina jelkeriana, en la
derecha o en la izquierda, la ubicaría en la derecha, pues es más parecida a
una religión, que a un sendero mágico, pues creo en la devoción desinteresada,
y no tanto en los poderes mágicos, que vienen y se van, y no son confiables,
además de que inflan demasiado al ego del devoto. Mi sendero es más religioso y
místico, que mágico. Sin embargo, hay errores, en ambos seguidores. Los de la
derecha imperfecta, creen que en el Nombre de Yahvéh-Dios, pueden agredir a los
demonios impunemente, y creen que pueden dominar demasiado a la naturaleza. Y
los de la izquierda imperfecta, creen que pueden agredir a Yahvéh-Dios
impunemente, además de que creen que pueden dominar demasiado a la naturaleza,
y además de que creen que pueden elegir ser su propio Dios, y no unirse al Dios
Creador, planteando esto como un camino, con un objetivo distinto a la derecha.
Los de la izquierda imperfecta están más errados, pero los de la derecha
imperfecta, también están errados. En realidad, si somos profundos, la doctrina
jelkeriana, no está ni en la derecha ni en la izquierda, ni en el supuesto
centro, que junta los errores de las dos, sino que está arriba de todo, y más
cerca de Jelkerá-Dios. No hay derecha e izquierda, ni siquiera centro, lo que
hay, es arriba y abajo, comprensión incorrecta, y comprensión correcta.
En mi doctrina, no enseño demasiado sobre la izquierda,
pues la gente no sabe usar el verdadero conocimiento, que une con el espíritu,
a través de la materia. Un bisturí, es una herramienta de salvación, en un cirujano
con conocimiento y buena voluntad, pero es un arma mortal, en un ignorante, o
en una persona de mala voluntad. El peligro de usar la continuidad, es que solo
los devotos avanzados, la saben usar para su progreso espiritual, mientras que
los demás devotos, caen en el vicio, y se terminan apartando de la
espiritualidad, usando a la continuidad, como una excusa para caer en la
materia, con una máscara de supuesta espiritualidad, que en realidad, es
materialidad. Tantra significa, tejido, doctrina, o más profundamente,
continuidad entre la materia y el espíritu, pero ha pasado a significar, para
personas de poca comprensión, sexualidad exacerbada, cuando el Tantra Verdadero,
en realidad, está más allá de todo ello. El Tantra es el único sendero
espiritual que no demoniza al sexo, y ha terminado sufriendo desprestigio, no
tanto por los que lo rechazan, sino que por aquellos que dicen hacer del
Tantra, el culto de sus vidas, lo cual es una pena, pues el tantrismo shivaísta
original, como fue y es inspirado, por el Dios Shiva y la Diosa Shakti, es
parte de la verdad espiritual más elevada, más allá de los canalizadores, que
han cometido errores en su explicación y en su aplicación.
El Tantra Verdadero o la Continuidad Verdadera, y el
Dharma Verdadero o la Ley Verdadera, son la Disciplina Espiritual Avanzada, que
une al alma con Jelkerá-Dios, previa divinización del alma espiritual, en el
éxtasis de la ascensión espiritual. La oración y la meditación, son los medios
más elevados de unión con Jelkerá-Dios, pero por medio de la ofrenda de
placeres materiales, a Jelkerá-Dios, o al Señor Shiva, o a la Señora Shakti, es
posible aprovechar lo que nos hace caer, para que nos ayude a ascender.
Desperdiciar este medio divino de ascensión, es equivocado, pero exacerbarlo,
también es equivocado. El buen uso, siempre es lo mejor, para todos, pero éste
conocimiento, no es para todos, sino que solo es para los más avanzados. La
pura verdad es que no hay, ni derecha, ni izquierda, ni centro, pues solo hay,
arriba y abajo, y la doctrina jelkeriana, es la única que está arriba.
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