Sometiéndote al Demiurgo

Sometiéndote al Demiurgo, tendrás la solución a muchos de tus problemas. Tendrás que rendirle alabanza y servicio, y tendrás que soportar a tus enemigos, pero Demiurgo te dará sustento, y de tiempo en tiempo, verás que estás un poco mejor, que tus enemigos desaparecerán, y que muchos trabajarán para tu bienestar, aunque realmente no quieran hacerlo, pues el Demiurgo los obligará a hacerlo.
Tu familia, tus amigos, y el pueblo, no te rechazarán, y te dejarán vivir en paz, pues formarás parte del sistema de control social, que mantiene al mundo en funcionamiento.
Verás que gente despierta, es despedazada por el mundo, y que todos se les ponen en contra, que pierden a sus familias, a sus amigos, a sus trabajos, y que incluso toman decisiones que los llevarán a la ruina, pues el Demiurgo confundirá sus mentes, para para que vean fantasmas donde no los hay, y para que confundan a enemigos con amigos. Verás cómo incluso gente desconocida, que no sabe nada de su despertar espiritual, los termina odiando, por cualquier tontería, pero allí verás la inexorable mano del Demiurgo, pasándolos por el fuego del infierno en vida.
El Demiurgo es tu Dios, y él te ha despertado, no para que te opongas a él, sino que para que lo sirvas mejor, a conciencia, para de ésa forma,  poder darte un destino mejor, de ser posible, en éste mundo, y luego, una eternidad de dicha, en el otro mundo. El Demiurgo te ha despertado, para darte vida, y para dártela en abundancia, pero debes seguir sirviéndole, pues él es quien da y él es quien quita.
Una vida de sometimiento al Demiurgo, es una vida de felicidad, pero una vida de lucha contra el Demiurgo, es una vida de tristeza e infelicidad. Los desgraciados que se revelaron en contra del Demiurgo, han sido condenados por amigos y enemigos, en razón de su locura. Incluso el ángel rebelde, trabaja al servicio del Demiurgo, lo quiera o no.
Solo hay libertad, en el sometimiento al Demiurgo, que es Dios, el Creador. Si te sometes, se te da libertad, pero si te revelas, irás a parar al abismo, en éste mundo, y en el otro.
Sólo el Demiurgo, da bienestar, al rico y al pobre, pero quien se revela contra el Demiurgo, será infeliz, sin importar si es rico o pobre.
Únete a los ejércitos del Demiurgo, pues no hay un Dios por encima de él. Incluso Cristo obedece al Demiurgo, pues está sentado a su diestra. Ama y obedece al Demiurgo, y él te abrazará con su luz.
El mismo Dios Altísimo, tiene un Aspecto Impersonal, que es Dios propiamente dicho, Yahvéh-Primero-Original, y un Aspecto Personal, Yahvéh-Segundo, que es el Demiurgo propiamente dicho. El Ser es Uno, aunque sus manifestaciones son dos.
Si te arrodillas ante el Demiurgo y lo alabas, tendrás el poder de hacer y de deshacer, muchas cosas, con el poder de la palabra. Es el mismo poder de la Presencia Yo Soy, y de la Flama Violeta, que usó Jesús, y que enseñó Saint Germain.
No dejes que el Diablo, arruine tu relación de amor y obediencia con el Demiurgo, pues la única luz verdadera, viene del Demiurgo, Yahvéh Sabaoth, el Señor de los Ejércitos.
Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso no ves cómo tu vida se ha arruinado, por seguir la doctrina de los que decían liberarte? No fue culpa de ellos, tú mismo tenías odio contra Dios, y ellos solo lo sacaron afuera. Eras una bestia semi-despierta, y ellos activaron tu parte de bestia. Ahora debes empoderarte a ti mismo, despertar a tu divinidad interior, y servir a aquel que realmente te ha despertado, el Demiurgo, que eleva al alma madura, y que pone trampas al alma inmadura.
Ese Dios, Yahvéh, que creó lo bueno, también creó lo malo, y eso está bien, pues impulsa la evolución espiritual de los seres, reencarnación tras reencarnación. Fue Yahvéh quien abrió tu chakra del tercer ojo, para que veas la verdad, y debes agradecerle. No se puede juzgar al Demiurgo, como si fuese un hombre, pues él está por encima de la humanidad, siendo el Yo Superior, de todos los seres.
Alaba y sirve a Yahvéh, tu Dios, el Creador, el Espíritu Demiurgico, y sé libre.
Vuelve al Demiurgo, y él te perdonará, te cubrirá con su luz, y te dará su amor. No hay reencarnación en mundos de dolor, para los espíritus despiertos, a la inmanencia y a la trascendencia, divinas, pero tu servicio en éste mundo, será mantener el sistema de control y encubrimiento, pues la gnosis o iluminación, siempre será un misterio, aunque toda la información, esté delante del público, y tú debes mantener ese misterio.
El misterio de la luz, solo es para aquellos que han sido bendecidos por el Demiurgo y sus ángeles, y la falsa luz de Satanás, es el camino a la ruina y a la maldición. Sin embargo, satán también es un siervo del Demiurgo.