El Principio de la Gnosis es el Auto-Conocimiento Espiritual.
Nosotros
somos ondas en el océano de la conciencia divina. La Conciencia Única, que es
Dios Abraxas, se expresa como muchas cosas, y como muchos seres, pero en el
fondo, cada ser y cada cosa, siempre es la misma Conciencia Única.
La Conciencia
Única, está por dentro y por encima, de todas las cosas, y en el fondo, todo es
uno y todo es la Conciencia Única. La Conciencia Única, es real y es eterna,
mientras que todo lo demás, es ilusión y es pasajero. Si basas tu felicidad en
lo eterno, siempre serás feliz, y encontrarás consuelo, pero si basas tu fe en
lo pasajero, entonces, tu felicidad será pasajera, y no siempre serás feliz, y
no siempre encontrarás consuelo. Todas las cosas, emanaron de la Conciencia
Única, moran en la conciencia Única, y se absorberán en la Conciencia Única.
Nosotros somos ondas, creadas en el océano infinito, que la conciencia Única
es.
No preguntes,
que es la Conciencia, pues tú eres conciencia, vienes de la conciencia, naciste
en la conciencia, estás hecho de conciencia, la conciencia está dentro y fuera
de ti, morirás en la conciencia, y volverás la conciencia. La conciencia, es
mucho más que el discernimiento de lo que es real y de lo que es irreal, o de
lo que es bueno y de lo que es malo, pues la conciencia, es el Todo mismo.
El mantra
supremo, que permite experimentar, éste auto-conocimiento espiritual, de la
Conciencia Única, es el mantra; “Om, Yo Soy Uno con el Todo.” Por medio de éste
mantra, experimentas a la Conciencia Única, y a todas las ondas del Océano
Infinito, que tú eres, y que todos son, en tu interior. Éste es el mantra del
santo nombre de Dios, que es Yo Soy, y que permite conectar, con la Fuente
Original. Cuando aceptas que eres uno con el Todo, por pura intuición, sin
necesidad de ningún argumento, más allá de la mente, allí, te encuentras con tu
Dios Interno. ¿Y cómo sabes que esto es verdad? Lo sé, porque lo siento, y lo
sé, por el poder de Dios.
La gnosis es
el auto conocimiento espiritual, y la gnosis, no consiste en seguir a un
maestro, o en seguir a un libro, o en seguir a una iglesia, sino que consiste,
en seguirse a uno mismo. Los libros, los maestros, y las iglesias, pueden
indicar el camino hacia el interior de uno mismo, pero finalmente, de nada
sirven, si uno mismo, no sigue el camino hacia el interior de uno mismo, por su
propio esfuerzo.
Uno solo
junto a Dios es lo bueno, y todo lo demás, sobra. Pues Yo soy uno con Dios
Abraxas, pues yo soy una expresión del Eterno. Yo soy más que una criatura de
Dios, o que un hijo de Dios, pues Yo Soy, una expresión de Dios, y un reflejo
de la Luz Eterna, que es Dios mismo. Hombre, conócete a ti mismo, y conocerás a
los dioses, y al universo entero.
Ésta gnosis,
no se puede explicar con palabras, pues es la pura conciencia, que está más
allá de la mente. Ésta gnosis no es la destrucción del Yo, sino que es la
glorificación del Yo. No debemos destruir al ego, sino que debemos
enriquecerlo, con amor y con sabiduría.
“Yo Soy Uno
con la Conciencia Única”, es un gran mantra, para la salvación del alma, y la
liberación del espíritu. Esto no consiste en pertenecer a un partido, sino que
se trata de pertenecer a ti mismo. Tú no eres, ni de éste grupo ni del otro,
pues tú eres de Dios. No te partas en un partido, sino que abraza a la divina
unidad.
El principio
de la gnosis es el auto-conocimiento espiritual, o el conocimiento de sí mismo,
y en éste camino espiritual, el principio del camino, es el desarrollo del
camino, y el final del camino. Siempre giramos en torno a la misma idea, y
nunca nos aburrimos, pues ésta idea nos hace felices, y le vamos encontrando
cada vez más profundidad. La gnosis es como un pozo sin fondo, y mientras más
profundamente caemos en él, más profundidad le vamos encontrando. La
profundidad no se logra leyendo libros o siguiendo reglas, sino que la
profundidad se logra meditando, en uno mismo, y en la unión eterna, entre el
alma y Dios. La gnosis es un conocimiento espiritual intransferible, solo Dios
Abraxas, tiene el poder de despertar la gnosis, dentro de uno mismo. Y mientras
más practicamos la gnosis, a lo largo del tiempo, más utilidad, le vamos
encontrando. Porque te amas a ti mismo, si puedes mejorar lo externo, entonces
mejoras lo externo, pero si no lo puedes mejorar, entonces no lo mejoras, pero
aun así eres feliz, pues te amas a ti mismo.
El principio
supremo de la gnosis, es que te conozcas a ti mismo, en tu esencia más
profunda. Luego, ámate a ti mismo, y cree en ti mismo, todo lo cual se hace,
primero creyendo, y luego meditando, en el santo mantra, “Om, Yo Soy Uno Con El
Todo.” Éste es el principio supremo, de la sabiduría espiritual y esotérica, y
aunque no es el camino de la mayoría, que siguen a un Dios Externo, es el
camino de los elegidos. Pues muchos son los llamados, pero pocos son los
elegidos. Paz a todos los seres.
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