Pequeño Credo Jelkeriano.

• Pequeño Credo Jelkeriano.
• “Yo creo que, Jelkerá-Dios, es el Ser Supremo, que está, por encima de todo, y por dentro de todo. Todo emana de Jelkerá-Dios, mora en un fragmento de la mente de Jelkerá-Dios, y luego vuelve a Jelkerá-Dios, en absorción, al terminar su proceso evolutivo. Todo lo que sucede, sea bueno o malo, es bueno para Jelkerá-Dios, pues todo hace, que el alma evolucione, hacia su liberación, en el tiempo eterno de Dios.
• El alma individual, se salva por la fe en el Dios Omnipresente, a través del Cristo-Interno Individual, y las obras de bien, ayudan en la evolución del alma. La mente influencia a la realidad, en algún grado, y la oración de fe, se puede usar, para, pedir, agradecer, y alabar a Dios, en su unidad y en su diversidad, en espíritu y en verdad. La reencarnación del alma, es una expresión de la infinita misericordia de Dios, y por ley de retribución, se devuelve lo bueno o lo malo, que se haga a otros. La misericordia de Dios es Infinita, y el perdón de los pecados, propios y ajenos, es un camino a la liberación. Se debe, amar a Dios, con todo el corazón, y amar al prójimo, como a uno mismo.
• Jelkerá-Dios creó a todas las cosas, con su mente y con su palabra, y el Señor Fanes, renacido del Huevo Cósmico, es el Primer Ángel Creador, mientras que la Señora Sofía, es otro Ángel Creador, que nutre de vida, a todo el universo.
• Y siempre, es bueno, tomar en cuenta, estas cuatro cosas; 1-El Hombre propone, pero Dios dispone. 2-Hay que ocuparse de lo que uno puede hacer, y no hay que angustiarse por lo que uno no puede hacer. 3-Hay que dejar que el río fluya, y hay que recordar, que uno mismo, es uno con el camino del Todo. Y 4-Si fluyes en la dirección de la corriente del río, todo te será más fácil, que si vas en dirección opuesta a la corriente del río.
• Om, Alabanza, Gratitud, y Amor, a Jelkerá-Dios. Yo Soy un alma liberada, en unión eterna, a mi Cristo-Interno Individual. Amén.”