Dios según Hermes: Como amarse a sí mismo, y ser feliz.
Yo soy Uno con el Todo. Todos, somos Uno con el Todo. Nadie es especial, pero ese conocimiento, es especial. El universo es un pensamiento pasajero, en la mente del Uno Eterno, pero la ilusión, no está tanto en el pensamiento pasajero, como en la idea de separación. La unión es la verdad esencial, más allá de la separación ilusoria.
Ahora aprenderás a vivir bien contigo mismo, y así vivirás en el paraíso, en donde quiera que estés. Ámate a ti mismo, en unión con el Uno, y sigue tu propio camino en paz, recordando que éste mundo es ilusión, y que tu yo verdadero es el Uno. En realidad, en el Uno estás completo, y nada te falta. Solo harás lo esencial, y siempre comprenderás, que todo está bien, tal como está. Así facilitarás lo que sucede, yendo en la dirección de la corriente del río, en vez de ir a contra corriente, y todo te será más fácil. El mundo sigue su propia evolución, pues todo viene del Uno, y todo volverá al Uno.
Ámate a ti mismo, y si puedes mejorar lo externo, mejóralo, pero si no puedes mejorarlo, no lo mejores, pero estés como estés, aun así serás feliz, pues te amas a ti mismo. La totalidad de ésta doctrina podría resumirse en amarse a uno mismo.
El Ser es, y el No Ser no es. Si hubiese algo fuera del Ser, eso sería el No Ser, pero como ya dije, el No Ser, no es, y por lo tanto, para no caer en contradicción, me veo forzado a aceptar que el Ser es Uno.
Si el Ser es Uno, entonces, la multiplicidad de seres y de cosas, es una ilusión, de la misma forma que tú eres un ser real, pero tus sueños son ilusiones pasajeras.
El mundo, es entonces, un sueño del Uno, del cual, el ser individual, despierta, cuando acepta que es uno con el Ser, más allá de la ilusión, lo cual es un despertar espiritual.
Tú eres un pez, hecho de agua, que nada en un océano de agua. Tú eres un ser individual, hecho del ser universal, que nada en un océano de ser universal.
El despertar espiritual, consiste en aceptar, por pura intuición, sin saber por qué lo aceptas, por pura fe, que tú eres uno con el uno. Todos los seres individuales, son uno con el Ser Universal, pero solo las almas despiertas lo aceptan.
El sueño es un pensamiento, y el pensamiento, aunque pasajero en comparación con la mente, es real a su manera. La ilusión no es el pensamiento, si sabes que solo es un pensamiento de la mente, la ilusión es pensar que estás separado del Ser Universal.
Tu goce será eterno, teniendo, disfrute en la alegría, consuelo en la tristeza, y una vida entera de esperanza, si aceptas que eres uno con el Uno. Estás Unido al Ser, y en el fondo, eres el Ser,  más allá de este océano de pensamiento e ilusión. No busques realizar, lo que ya está realizado. No busques lo que ya tienes. Solo concientiza, que ya tienes lo eterno, y así, serás feliz.
Pensar demasiado en la ilusión, que te separa del Uno, lleva al sufrimiento, pues la ilusión está hecha para sufrir, y el despertar está hecho para la verdadera felicidad, que no muere con el cuerpo.
Si el Todo es Uno, entonces, el dos, el tres, y todos los demás seres y cosas, fuera del Todo, son un pensamiento pasajero, de la mente del Todo eterno. Cada ser y cada cosa, es uno con el Todo, aunque nade en un océano de pensamiento, y si despierta del sueño o de la ilusión de separación, entonces, ya es una alma liberada.
No es que ya no causes daño a otros seres vivos, para poder vivir. Es que ya eres consciente de que eres uno con el Uno, donde todos somos uno, y cada quien está lleno por sí mismo. 
Buenos mantras que podrías practicar, para recordar ésta sabiduría, serían mantras parecidos a éstos; “Yo Soy Uno con el Uno”, “Yo Soy Uno con el Ser”, “Yo Soy Uno con el Todo”, “Yo Soy Uno con Dios”, “Yo Soy un Pez de Conciencia, que nada, en el Océano de la Conciencia”. De ésta forma, seguirás elevando tu conciencia, a la par que no olvidarás, la verdad esencial, de que eres uno con el Uno. En realidad, toda ésta sabiduría, puede sintetizarse, en que todo es uno. Ésta es una forma de practicar esta sabiduría, pero más importante que decir el mantra o pensar en él repetitivamente, es creer en su profundo significado. Veo que tú ya aceptaste la verdad esencial, pero quizás, por momentos te desconcentras de ella. Para ayudarte en tu desarrollo espiritual, te doy estas instrucciones, que no sustituyen lo que sabes, sino que afirman lo que ya sabes, dándole una nueva dimensión.
Todos somos Uno, y cuando un ser concientiza esto, se salva a sí mismo, y comprende que todos son salvos, cada cual en su tiempo. Es poco lo que debe hacerse, cuando se logra ésta conciencia, y de hecho, el espíritu consciente, ya no hace mucho, sino que se limita a hacer lo esencial.
Cuando vives en unión consciente con el Ser, contigo mismo, no estás acusando a los demás de no estarlo, ni te preocupa lo que los demás piensen de ti. Simplemente gozas de tu ser interior, sin preocuparte por las apariencias o el qué dirán. Casi ni eres consciente de que eres un sabio, y no te importa comportarte como un tonto, y justamente por eso, eres un sabio. Nadie comprende los cimientos del sabio, pues el sabio tiene cimientos invisibles. Vives en el mundo, sin ser del mundo, y esa es la verdadera soledad, no para exhibirla, sino que para gozarla.
YO SOY UNO CON EL TODO. TODOS, SOMOS UNO CON EL TODO. NADIE ES ESPECIAL, PERO ESE CONOCIMIENTO, ES ESPECIAL. EL UNIVERSO ES UN PENSAMIENTO PASAJERO, EN LA MENTE DEL UNO ETERNO, PERO LA ILUSIÓN, NO ESTÁ TANTO EN EL PENSAMIENTO PASAJERO, COMO EN LA IDEA DE SEPARACIÓN. LA UNIÓN ES LA VERDAD ESENCIAL, MÁS ALLÁ DE LA SEPARACIÓN ILUSORIA.