La idea del Tao, es una idea intuitiva, que tiene un fundamento, que es éste; El verano tiene días calientes, pero algunos días de verano, son fríos. El invierno tiene días fríos, pero algunos días de invierno, son calientes. En el mismo lugar, está oscuro de noche, y está luminoso de día. De todo esto se deduce, que lo Oscuro o Yin, tiene algo de Luminoso o Yang, y que lo Luminoso o Yang, tiene algo de Oscuro o Yin. Y de esto, también se deduce, que lo Oscuro o Yin, se transforma en Luminoso o Yang, y que lo Luminoso o Yang, se transforma en Oscuro o Yin, siguiendo una ley de ciclos, dónde una cosa, se sucede a la otra, y la otra cosa, se sucede a la una, y así, el ciclo se repite eternamente.
Todas las cosas, vienen del No Ser, moran en el Ser, y luego, vuelven al No Ser. Pero como todo contiene algo de su opuesto, entonces, el Ser, tiene algo del No Ser, y el No Ser, tiene algo del Ser. En conclusión, el No Ser, es Algo o Alguien, Supremo, de dónde todo viene, y adónde todo regresa. Y a ése Algo o Alguien Supremo, que es una fuerza invisible, que controla a la ley natural de ciclos, y a todas las leyes naturales, yo le digo, el Tao o el Camino. Pues si hay una ley, entonces, hay un legislador, y el Legislador Supremo, es el Tao o el Camino.
El Camino, es la fuerza que creó a todas las cosas, y por su poder, todas las cosas, serán llevadas de retorno al Camino, y por lo tanto, todas las cosas, son llevadas hacia la perfección, y en ello, el conocedor del Camino, encuentra su paz, suceda lo que suceda.
Los dioses son poderosos, en el cielo y en la tierra, pero antes de los dioses, y antes del cielo y la tierra, era y es para siempre, el Tao o el Camino. Deja que el río fluya, y recuerda que eres uno con el Camino.
El Camino, es lo más pequeño de todo, pero también, es lo más grande de todo. Por eso, yo creo en el camino, y sigo su virtud.
Deja que el Río Fluya, y recuerda que eres uno con el Principio Único. Gana o pierde, pero recuerda que ser uno mismo, ya es una victoria.
Todo es relativo, a lo que es, al lugar en dónde se encuentra, al momento en dónde se encuentra, y a las circunstancias en dónde se encuentra, y por eso, todas las verdades, son semi-verdades, pues es mucho, lo que hay que saber, para juzgar la verdad o la mentira, de algo.
El Camino es muy grande, y no puede ser entendido en su totalidad, pero entender eso, ya es entender algo sobre el Camino, y lleva a la verdadera sabiduría.
Dejar que el río fluya, no significa que no se actuará, buscando lo mejor, para uno mismo, y para los demás. Dejar que el río fluya, es nadar a favor de la corriente del río, para llegar a dónde uno desea, pues de esa forma, todo será más fácil, que yendo en dirección opuesta a la corriente del río. Es más fácil, nadar en medio de las circunstancias, que tratar de huir de las circunstancias, pues eso, en realidad, es imposible. El sabio toma lo que tiene, y trata de hacer algo bueno con ello.
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