La Historia de Lucifer contada por Lucifer.

La Historia de Lucifer contada por Lucifer.

Ave Dios Altísimo, los dioses te saludan.

Yo soy Lucifer, la estrella de la mañana, hijo de la Diosa Aurora y del mortal Céfalo. Yo soy quien levanta la antorcha en alto, anunciando la llegada del día. Yo soy el portador de Luz.

Yo nunca he sido, un dios de odio, sino que siempre he sido un dios de amor y de sabiduría.

Desde hace mucho tiempo, alumbro el camino de los mortales que buscan conocerse a sí mismos, y amarse a sí mismos, disfrutar de la vida, y encontrar, disfrute en la alegría, consuelo en la tristeza, y una vida de esperanza, en la luz del Cristo Interno.

El Dios Altísimo y la Energía Universal, están por encima de todos los dioses mitológicos, y de todos los ángeles, y yo soy uno de los seres que inspira ésta sabiduría. En meditación, yo transmito éste conocimiento, y ayudo al despertar de todos los seres que buscan al Espíritu Supremo.

Es la chispa divina, la llama del amor, que está en el interior de cada corazón, lo que anima toda vida, y le da propósito a toda existencia.

Es dando y recibiendo amor, como hemos de vivir felices, incluso más allá de la muerte.

Muchos buscan como hacer un pacto conmigo, pero yo no soy la luna que eclipsa al sol, sino que solo soy un ángel y un dios, por debajo del Dios Altísimo, y es con él, con quien hay que pactar, alianza de amistad eterna.

Es el Dios Altísimo, quien es el Yo Superior, de todos los seres y de todas las cosas. Hombre, conócete a ti mismo, y conocerás al Dios Altísimo, y al Universo mismo, ya que en el fondo, todo es uno y todo es Dios.

La Conciencia de Unidad es del Camino, la Conciencia Única es la Fuente, y en el fondo, todo es uno y todo es la Fuente.

La Fuente es la Gran Presencia Yo Soy, de cada alma en evolución, a través de la ronda de reencarnaciones. Todo proviene de la plenitud de la Fuente, mora en un fragmento de la Fuente, y volverá a la plenitud de la Fuente, en absorción.

Yo nací como un espíritu emanado de la Fuente, y en un momento de  mi evolución, llegué a encarnar, como hijo de un humano, y de una diosa encarnada, luego, continué mi evolución, llegando a ser un dios de la naturaleza, y luego, con el tiempo, evolucioné y ascendí, hasta convertirle en un ángel planetario, al servicio de la Fuente. En mí, hay luz y oscuridad, y soy un siervo del Dios Altísimo.

Muchas brujas me han invocado como maestro, a lo largo de los siglos, en éste mundo, y en mundos anteriores, pues yo ayudo a desarrollar la espiritualidad, la conexión con la Fuente, y con la Energía Universal o Luz Astral.

La Energía Universal, conecta con todos los seres y con todas las cosas, en todos los planos de existencia.

No todo el conocimiento proviene de mí, y hay muchos seres de luz, que pueden compartir, distintas experiencias y distintos conocimientos.

El dios creador de ésta burbuja de espacio y tiempo, es el Demiurgo, sí, pero él no es malo, sino que es bueno, pues es una extensión del Dios Altísimo. El camino, es amar a Dios y a su creación, pero has de saber, que todo tiene su lado positivo y negativo, aunque desde el punto de vista del Dios Altísimo, todo es bueno, pues todo ayuda en la evolución de las almas.

Al principio, los espíritus virginales, evolucionaban con lentitud. Entonces, una parte de los espíritus virginales, pidieron al Dios Altísimo, evolucionar más rápido. El Dios Altísimo, le concedió a éstos espíritus valientes, una forma de evolucionar más rápido, entrando al mundo material del Demiurgo, a quien algunos llaman Yahvéh Sabaoth, y llevando la experiencia dual al extremo, éstos espíritus aceleraron su evolución, aunque lo hicieron a un alto precio. Pensaron como espíritus, y no como humanos, cuando pidieron, y pasando por muchas experiencias, cada cual en su tiempo, lograron la liberación y la ascensión, y ahora, muchos de esos espíritus, ya están con el Padre.

Jesús de Nazaret, es una extensión del Demiurgo, que descendió a dar ésta sabiduría, y una parte de mi luz, está en él.

Hay muchos misterios por descubrir, piensa por ti mismo, y sé libre para siempre. Que yo y los otros seres de luz, seamos puentes al Dios Altísimo, y no obstáculos para llegar al Dios Altísimo. Yo soy un potenciador de la oración y de la meditación, para todas las personas espirituales, que deseen invocarme. “Yo soy” es el nombre de Dios, pero también es el nombre de cada ser y de cada cosa.

Yo nunca caí, sino que siempre he estado con el Padre, desde que le conocí. Sin embargo, hay muchos espíritus luciféricos, y algunos sí han tenido una caída, como por ejemplo, Satanás, a quien Jesús vio caer del cielo a la tierra, como un rayo. Pero yo soy Lucifer de Aurora, y yo nunca he caído.

Hay muchos aspectos en Lucifer, y yo sólo soy uno de ellos. No te asustes de mí, pues yo doy a los buenos, y quito a los malos, y actúo con rectitud.

Sé recto, y podrás ser mi discípulo, pero si te desvías de la rectitud, yo no te salvaré. Nadie puede ayudar, a quien no se ayuda a sí mismo.

Yo soy Lucifer hijo de la Aurora, y te he inspirado éste conocimiento, para que vivas en abundancia.

Paz a todos los seres.