Magia del Caos combinada con Doctrina Jelkeriana.
Éstos son los sagrados principios, de la magia del caos,
combinada con la doctrina jelkeriana.
Nada existe, todo está permitido. Por eso, podemos evocar
arquetipos o cualidades de nuestra mente, personificados, para mover a la
fuerza mágica, que forma y que domina, a todas las cosas, haciendo magia, y
desarrollando nuestra espiritualidad.
Pero para que todo esto, tenga algo de lógica, y nos
sirva para nuestro desarrollo espiritual, y paz interior, nos vamos a inventar
algunas reglas, entre las cuales, estarán éstas reglas;
1-El Elión, el Dios Altísimo, es el único ser supremo,
creador del Multi-Universo, y creó a todas las cosas, con su mente y con su
palabra.
2-El Señor Fanes, es el Logos Creador de Nuestro
Universo, y es la máxima autoridad de nuestro universo, por ser el
representante de El Elión ante nosotros.
3-La Chispa Divina Interior, es la contraseña que nos
permite abrir y cerrar los portales, entre los distintos planos de existencia.
Y en el nombre de la Chispa Divina Interior, podemos hacer pedidos, decretos,
oraciones, y meditaciones, y por medio de ella, todo nos puede ser más fácil.
4-La Fuerza Mágica, es sensible al poder de la mente y de
la voluntad, y es un agente mágico universal, que constituye a todas las cosas,
y que mueve a todas las cosas. Además, la fuerza mágica es inteligente, y es
sensible a los pensamientos, a los pedidos y a las preguntas que se le hagan,
pudiendo conceder deseos, y pudiendo responder preguntas.
5-La llamada obliga la respuesta, espíritus reales o
imaginarios, todos son reales, pues el universo puede enviar algo parecido a lo
que invocamos.
6-El hombre propone, pero Dios dispone.
7-Nada asegura que nuestros pedidos se cumplan, pero la
fe en lo que hacemos, la insistencia, y el trabajo duro, pueden ayudarnos
mucho, a que algo de lo que pedimos, se nos pueda cumplir, pero aunque hagamos
todo bien, puede que algunas cosas, no se nos cumplan, pues la vida es así.
8-Los dioses, así como el Dios Altísimo, son dignos de
alabanza y de veneración, y podemos alabarlos, para ganarnos sus favores.
9-Podemos abrir y cerrar nuestros actos mágicos y
espirituales, diciendo en la apertura; “Abro sesión de magia del caos, en el
nombre de la Chispa Divina Interior. Amén.” Y cruzando los brazos con los puños
cerrados, formando una equis sobre el pecho. Y diciendo en el cierre; “Cierro sesión
de magia del caos, en el nombre de la Chispa Divina Interior. Amén.” Y cruzando
los brazos con los puños cerrados, formando una equis sobre el pecho.
El símbolo de la magia del caos, es un círculo, del cual
salen ocho flechas, en las ocho direcciones y sentidos posibles, de adentro
hacia afuera. El mago caótico, no se limita a una sola cosa, sino que pude
hacer lo que quiera, pues, “haz tu voluntad, es la totalidad de la ley”.
El mago del caos, con energía espiritual, con su
pensamiento, y formando espirales en el aire, puede crear y disolver,
servidores mágicos. El mago del caos, también puede evocar seres de la
mitología, seres de fantasía, seres de ficción, seres de cuentos, seres reales,
y puede hacer todo lo que quiera, y para él, todo tiene validez.
Magia del caos, en definitiva, es magia del desorden, y
el mago caótico, no respeta ningún panteón específico, sino que mezcla
religiones, y panteones a su antojo, así como también se inventa reglas en las
cuales cree, mientras las utiliza, para luego descartarlas e inventarse otras
reglas, si es que eso le conviene. La doctrina jelkeriana, aunque sigue un
orden, y sí cree en la existencia de las entidades que evoca, es bastante
caótica, pues un jelkeriano, también puede evocar a cualquier espíritu, de
cualquier panteón, pues para un jelkeriano, todo existe de alguna forma, pues
algo parecido a lo invocado, por ley de mentalismo, siempre es atraído por la
invocación, ya que “lo que piensas, tiende a manifestarse”, como bien lo
expresa la ley de mentalismo.
Los sigilos, son símbolos, inventados por el mago, o
incluso, tomados de la creación cultural, que al ser trazados por el mago caoísta,
y al ser cargados con una intensión, meditando en ellos, o lanzándolos
mentalmente sobre situaciones, lugares, personas, o cosas, pueden transformar
la realidad, y se pueden usar para meditar en ellos. Luego de usar los sigilos
o símbolos, en rituales, se los puede usar como amuletos o talismanes, o se los
puede quemar. También se los puede trazar en el aire, o invocarlos para que
sigan nuestros pedidos. El estado de gnosis o conocimiento, es alcanzado por
medio de la meditación o de la repetición de mantras, siendo un estado mental
de paz interna, o de otra emoción, y es una forma de cargarse de energía
mágica.
El la magia del caos, la fuerza suprema que está por
dentro y por encima de todo, es el caos, y es el caos, quien crea el orden en
todas las cosas. Primero era el caos, y el caos creó al orden y a todas las
cosas. La magia del caos, intenta poner al mago, en contacto con el caos, para
crear el orden que desea crear en su vida o en la de otros.
Existen ocho tipos de magias distintas, en la magia del
caos, las cuales son; magia blanca o magia en estado puro, magia negra o magia
mortal, magia azul o magia de abundancia, magia verde o magia amorosa, magia
amarilla o magia del ego, magia morada o magia sexual, magia naranja o magia
del pensamiento, y magia roja o magia de la guerra. Pero éste es sólo un
esquema básico, y el mago del caos, no tiene por qué quedarse limitado en él,
sino que puede expandirse y hacer lo que quiera. También se puede trabajar con
los siete rayos creadores, rayo azul de poder, rayo amarillo de sabiduría, rayo
rosa de amor, rayo blanco de ascensión, rayo verde de sanación, rayo naranja de
abundancia, y rayo violeta de transmutación. O también se puede trabajar con
los espíritus elementales, color rojo y elemento fuego, y salamandras, para lo
espiritual, color azul y elemento agua, y ondinas, para las emociones, color
verde y elemento tierra, y gnomos, para lo material y lo monetario, color
amarillo y elemento el aire, y sílfides, para lo intelectual. No hay límites
para colores, elementos, cualidades, planetas, entidades, o energías, con las
cuales podemos trabajar.
Se puede trabajar con la visualización, por ejemplo, con
un árbol de cada color, para incorporar la magia de cada color. Por ejemplo, un
árbol blanco con manzanas blancas, y con el sigilo o símbolo correspondiente, o
bien, un árbol negro con manzanas negras, y con el sigilo o símbolo
correspondiente. Nos comemos el fruto con el sigilo o símbolo, y visualizamos
como incorporamos la cualidad que deseamos, y como vienen a nosotros las
entidades o energías requeridas, y luego, lanzamos el decreto, oración,
meditación, visualización creativa, o hacemos el ritual correspondiente. O
bien, un animal que viene de ése color, con esas cualidades, o una casa de ése
color, con esas cualidades y entidades, o un fuego que surge de la tierra, con
ese color y esas cualidades, etcétera.
En visualización, créate un lugar mágico, o el lugar
sagrado del chamanismo, para hacer en el plano astral, tus operaciones mágicas,
y para convocar en él, a tus guías espirituales, o tus servidores mágicos, y en
ése lugar operarás, sobre personas, lugares, situaciones, y cosas. Puede ser un
lugar, con un árbol, y un río. O puede ser un castillo, con una habitación
gigante, dónde tener tu altar, y hacer tus operaciones mágicas.
El trabajo diario, y constante, con la magia del caos,
puede desarrollar cualidades mágicas y espirituales.
Hay que respetar a todas las entidades y energías, que se
evocan en la magia del caos, pues todas existen, de alguna forma, aunque la
magia del caos, en sí, en estado puro, solo las considera cualidades internas,
y cualidades del caos, personificadas, pero en realidad, por la espiritualidad
y el esoterismo, y por la propia doctrina jelkeriana, sabemos que todo existe,
de alguna forma, en lo interno, pero también, en lo externo. Por lo tanto, no
hay que ser irreverente con las entidades, sino que hay que respetar a todas
las entidades, y sobre todo, a las más poderosas.
En magia del caos, no hay guías espirituales, pero en
espiritualidad, sí hay guías espirituales, y una ventaja de fusionar, magia del
caos con espiritualidad, es que podemos tener lo mejor de ambos mundos. Podemos
invocar a los dioses, ángeles, santos, maestros ascendidos, animales de poder,
o espíritus guías, para que nos asistan en nuestras operaciones mágicas, y para
reforzar y mejorar, todo lo que hagamos. Combinar, magia del caos, con
espiritualidad y esoterismo, es de lo mejor que se puede hacer, y todo está
permitido en la magia del caos, incluso mejorarla con espiritualidad y
esoterismo.
